En nuestro artículo anterior te contábamos los pros y los contras de los diferentes tipos de piscina que hay y cuál se adaptaría mejor a tus necesidades, hoy te contamos cómo limpiar las piscinas y mantenerlas en un buen estado.
Para mantener una piscina se necesita hacer 3 tipos de limpieza, estas se dividen por la frecuencia en la que hay que realizarlas.
Limpieza semanal de la piscina
Si quieres evitar tirar el agua y volver a llenarla, tener una limpieza semanal es primordial. Es un tipo de limpieza muy superficial, quita la suciedad que caiga en la piscina, como hojas, insectos… Aspira bien la piscina y elimina la tierra y polvos que se pueden haber quedado en el fondo. Este tipo de mantenimiento se puede realizar por cuenta propia, no conlleva mucho trabajo extra.
Limpieza mensual de la piscina
Es una limpieza un poco más especial, evitarás que se convierta en un estanque verdoso en el que no puedas nadar. Necesitas suministrar cloro, equilibrar el PH y cristalizar el agua. Este tipo de materiales ya suponen un poco de gasto extra ya que tendrás que irlos reponiendo cada cierto tiempo. Si no sabes cómo hacerlo, te recomendamos que busques asesoramiento para hacerlo de la manera más adecuada.
Limpieza anual de la piscina
Cuando se termina la época de verano, es importante vaciar la piscina y lavarla bien con productos específicos, de esta manera la conseguiremos preparar para los meses inactivos que tiene por delante. Se debe desinfectar bien, para cuando llegue otra vez la época veraniega, podamos bañarnos sin problemas y con la máxima seguridad e higiene.
A parte de todos estos consejos que te demos, también debes tener en cuenta la depuradora, si no ha sido bien mantenida nos puede llegar a dar serios problemas. No descuides las válvulas y los filtros.